lunes, 7 de enero de 2008

Luis Plascencia


Son numerosos años los que Luis Plascencia Ascencio ha dedicado a una de sus mayores pasiones: el futbol. Primero lo disfrutó como jugador profesional, ahora es entrenador y director deportivo del equipo Cachorros, de segunda división, incluso ha incursionado en un programa de televisión como analista del balompié. El número 10 de aquellos Leones Negros, hoy añorados por muchos, es un emblema del futbol universitario y su historia en este deporte aún no termina de escribirse.
Los sueños
“De niño siempre quise ser futbolista profesional y cuando jugaba en el barrio, dormía hasta con las medias puestas un día antes. Los zapatos los ponía a un lado, boleados, para poderme ir a jugar”.
La meta
“Al iniciar como profesional, lo primero es que me encuentro con mis ídolos –Ignacio Calderón, Ricardo Chavarín, “Chepe” Chávez, el “Berna” García–, jugadores que había ido a ver al Estadio Jalisco como aficionado”.
Cien goles
“Hay cosas importantes en mi carrera. Una de ellas: haber metido más de 100 goles para la Universidad de Guadalajara en el futbol profesional, por lo que la directiva me hizo el honor de colocar una placa en el estadio Jalisco, a modo de reconocimiento. El gol número 100 lo metí jugando como locales contra Irapuato”.
Gol olímpico
“En el Jalisco solo se han anotado cuatro goles olímpicos en toda su historia. Uno de ellos fue mío. En un partido contra el Puebla. La anécdota es que antes de lanzarlo estaba vacilando con el juez de línea. Después del tercer tiro de esquina, le pregunté si había visto algún gol olímpico y me contestó que no, entonces le dije que se lo brindaba y en eso me salió la anotación”.
Récord Guiness
“Estamos peleando el récord Guiness por los dos goles más rápidos al inicio de partido y por medio de un mismo jugador: el primero lo hice a los 11 segundos y el segundo, a los 58”.
Las concentraciones
“En ese entonces entrenábamosdiario, incluso algunos días era doble sesión. En las concentraciones jugábamos cartas y ahora ya utilizan hasta videojuegos. Viajábamos mucho. Eso permite tener un gran círculo de amigos. En estos tiempos hay más partidos, son más viajes y concentraciones. Puede ser estresante, pero para quien vive intensamente el futbol, el ritmo de jugador no se vuelve pesado”.
Las anécdotas
“Anécdotas hay cientos. Desde cuando inicias y te novatean haciéndote pagar todo lo que consumes en el avión. Con don Nacho Trelles tenemos varias. Llegaba uno y le preguntaba ‘¿me pongo a calentar?’ y nos contestaba que sí, luego, al vernos correr, nos decía ‘pero a calentar el café’. Eran historias más blancas. Hoy ya los tiempos han cambiado”.
Los Leones Negros
“Son mi vida, mi pasión. Han sido el amor de mi vida. Lo he dado todo por el equipo, por eso nunca salí de los Leones Negros y he recibido muchas satisfacciones, todo lo que soy y lo que tengo. Me dio la satisfacción de contar con esta profesión, la oportunidad de trascender y conocer a gente importante”
Nota tomada de la Gaceta Universitaria